El año pasado me puse la meta personal de leer un libro al mes. Como aún estoy conociendo qué géneros son los que me llaman más la atención, me gusta tomar recomendaciones de la gente que me rodea. He leído romance, misterio, historia, autoayuda, pero quien me recomendó The Perks of Being a Wallflower fue mi mejor amiga, Pau. Ella me dijo que ese libro me gustaría porque los temas que toca son muy relevantes a lo que estamos viviendo hoy en día, ya que las dos somos estudiantes de secundaria.
The Perks of Being a Wallflower es un libro escrito por Stephen Chbosky y publicado en 1999. Está conformado por una serie de cartas escritas por el personaje principal “Charlie”, que está entrando a su primer año de secundaria. Charlie le dedica estas cartas a su querido amigo, El lector, lo que hace que el libro tenga un aire de familiaridad y que los personajes sean más auténticos y complejos.
El libro en general es una obra de arte que nos hace a nosotros, los lectores, reflexionar sobre la vida y cómo la miramos. Charlie toma una perspectiva muy linda y compleja. La lección de Charlie que más me impactó fue la de la empatía. No quiero contar mucho detrás de la frase, ya que se encuentra en las últimas páginas del libro y quiero que, si ustedes deciden leerlo, vivan la experiencia completa. Entonces, esta es la frase:
Esta frase me explicó a la perfección cómo muchas veces nos sentimos ahogados en nuestros propios problemas y luego nos sentimos culpables porque pensamos que tal vez nuestros problemas son insignificantes. No recuerdo dónde escuché esto, pero dice: «Hay dos personas, una se está ahogando con dos metros de agua y la otra con 20 cm de agua, pero ambas se están ahogando». Por eso te invito a que hables de tus problemas con alguien por más insignificantes que crees que sean.
Y, por supuesto, que también leas este libro…
Autora
Kamila Basterrechea
¡Hola! Soy Kami y estoy en cuarto bachillerato. Soy la más pequeña de tres hermanos y la orgullosa tía de dos sobrinitos. Me gusta mucho estar con mis amigos, ver películas, leer, escuchar música y hacer actividades afuera, pero lo que más me gusta son los animales. El caballo es mi animal favorito en el mundo y practico equitación desde hace cinco años.