El año anterior, empecé con una columna dedicada solo a un libro, El club de las 5 de la mañana, de Robin Sharma. Si tienen el tiempo de leerlo, háganlo. Se encuentra de manera digital como un PDF. Sharma nos habla sobre acciones que podemos tomar y tácticas que podemos aprender para ser autosuficientes y para llevar una vida exitosa. Con esta columna, pretendo resumir y dar algunas de las tácticas que él nos comparte, al igual que compartir mi punto de vista sobre ellas.

Táctica número 9: el sistema de Diseño Semanal (SDS)

Aquellas cosas que anotamos en nuestras agendas son las cosas que sabemos que son importantes, que son cosas que debemos hacer, resumir o completar con alguna fecha límite. Esta táctica se basa justo en eso, pues improvisar las cosas y dejarlas a última hora es algo que, a largo plazo, o a corto plazo incluso, tendrá una consecuencia.

La táctica se implementa al establecer treinta minutos cada domingo en la mañana para crear un «Plan de acción para una semana perfecta». En este, podemos anotar lecciones aprendidas y lo que debemos mejorar para la siguiente semana, enfocándonos en nuestras fortalezas y debilidades. Al usar esta táctica, amplificamos nuestra energía, organizamos nuestras opciones y garantizamos equilibrio. Después de anotar las cosas que debemos mejorar, se anotan todos nuestros compromisos. Sin embargo, no debemos olvidar el tiempo con nuestros familiares, amigos, aficiones o algún mandado que tengamos que hacer durante la semana. Siguiendo este proceso se puede aumentar la concentración, conseguir un buen ritmo en nuestras tareas y actividades y mejorar la productividad y el equilibrio de la vida.

Táctica numero 10: 60 minutos como estudiante

El concepto está en crear una mejor formación aumentando nuestros conocimientos a través del estudio. Cuanto más sabemos, mejor trabajamos. «La formación es una auténtica vacuna contra la desorganización. La gente más productiva aprende durante toda la vida».

La implementación de esta táctica esta en estudiar por 60 minutos cada día, ¡lo que sea que queramos estudiar! Puede ser de un tema alejado de la realidad o muy apegado a ella. Puede ser un tema como algo que nos apasione, como el futbol, o como voleibol. Este sería un crecimiento incesante. Aprender todos los días aumenta la perspicacia, profundiza la sabiduría y enciende la hoguera de nuestra grandeza. Nos convierte en pensadores grandes. Para hacer esto, podemos leer, revisar notas de algún cuaderno, hablar con algún mentor, así nos convertiremos en personas mejores e imprescindibles.

¡Espero que estas diez tácticas te ayuden!

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