Para esta ocasión entrevisté a Isabel Cacacho, graduada en 2016. A pesar de que se graduó hace ya algunos años, aún es recordada en el colegio debido a su gran conexión al sentido humano, lo que le permite mostrar libremente muchas emociones en escena. Sus guías de actuación en el colegio la recuerdan por su profunda capacidad de avivar lo que se imaginaba en el escenario, por su increíble creatividad y ambición de expresar sus ideas y su interior a través de la actuación. Su papel de Encaje en la obra «Ropa de teatro» de Manuel Galich fue el medio por el que su talento y gran potencial finalmente se dieron a conocer en el colegio. Tiene una gran habilidad para el drama, pues logra transmitir a su público las emociones del personaje que interpreta. Ganó la admiración y respeto de muchos. Tiene experiencia como actriz de teatro desde los seis años, y desde Quinto Bachillerato comenzó a participar en cursos de este arte fuera del colegio gracias a su trayectoria.

Actualmente, Isa es Licenciada en Cine y Artes Visuales, graduada de la Universidad Francisco Marroquín en 2020. Ha sido partícipe en más de 30 producciones con distintos roles. Ha participado en festivales de cine, largometrajes, cortometrajes y más como editora de contenido, directora, sonidista, guionista y en actuación de cine.

Algunos de sus proyectos y logros en su aún corta carrera:

• Editora de contenido en la productora de la UFM: New Media, incluidos videos promocionales destinados a redes sociales.
• Directora y sonidista en el MOOC de la Escuela de Salamanca.
• Partícipe en Zurich Film Festival 72 en tres ediciones con los cortometrajes «Summer’s Love» (2018) como directora de arte y «Design» (2018) y «Origin» (2019), los cuales dirigió.
• En total ha dirigido cinco cortometrajes.
• Directora de arte en el largometraje «Hidden Treasures of the Sweet Absolute».
• Cortometrajes más destacados en los que ha participado: «Hellena’s Circus» (2018) y «Lagartija» (2018).
• Ha participado en actuación de cine en cortometrajes como «La No.19» (2018) y «Body in the Closet» (2019), en el cual también fue guionista.
• VFS le otorgó una beca para formar parte de su programa Writing for Film, Television & Videogames en el 2021.
• Actualmente es intern en Guate Film Initiative.

Platiqué con Isabel Cacacho para conocer acerca del proceso en el que su talento salió a la luz y cómo esto la llevó a ser la increíble artista que es el día de hoy.

¿Qué experiencia resalta de tu trayectoria por el teatro del colegio?
En Tercero Básico, mi clase presentó una obra, que se llama «Ropa de teatro» y me la gocé mucho porque cada clase se esmeró mucho en presentar sus obras y fueron lo mejor. Entonces, creo que vi esa pasión por el teatro de mucha gente que nunca me lo imaginaba. Fue la primera vez que presentamos en Cayalá, creo que incluso fue la primera vez que el colegio lo hizo allí. Fue una experiencia súper interesante; poder ir por primera vez a un espacio público, saber que cualquiera podría entrar a ver estas obras y poder ver la pasión de mis compañeros al mismo tiempo. Fue muy lindo poder ver que algo que, generalmente, nunca compartía con personas del colegio, lo podía compartir ahora con todos. Y que todos se esmeraran tanto para esa presentación en Cayalá fue muy bonito; me impactó mucho.

¿Qué significó el teatro para ti y para tu vida?
Bueno, ¿qué sigue significando el teatro para mí y para mi vida? Como primer punto, el teatro fue algo que me ayudó a salir de mi zona de confort, de conocer cuál era mi zona de confort. Desde pequeña fui bastante reservada; últimamente, he dejado eso bastante atrás. Pero de pequeña me ayudó a expresar muchísimo mis emociones, cosas que me reservaba mucho, a enfocarlas a algo más y poderlas expresar de otra forma; a poderlas expresar en el teatro, con algún personaje. Si me sentía de alguna forma, podía enfocarlo a todas las emociones que tenía que representar en el teatro. Me ayudó mucho a no tener miedo a lo que estaba afuera, a confiar mucho en las personas a mi alrededor para representar una idea. Desde que empecé, supe que el teatro y actuar eran algo que nunca quería dejar y, básicamente, me ayudó a tomar todas las decisiones y a todo lo que he hecho hasta hoy. Me ayudó a descubrir que, por mis capacidades físicas, por mi voz, mis movimientos corporales, era más apta para el cine que para el teatro. Eso llevó a que investigara más del cine, todos los roles, todo lo que se necesita y lo importante que es que un actor conozca y respete estos roles me llevó a estudiar y graduarme de la escuela de cine de la Marro para aprender a ser una actriz más profesional en el cine en general. Al mismo tiempo, volverme en una cineasta, directora de arte, entre otras cosas. Ahorita me está llevando a estudiar guionismo en Canadá para conocer más de la creación de personajes: cómo nace, cómo es, qué lo motiva y cómo llevarlo en una historia, y así conocer más esas emociones que se pueden transmitir a través del cine. Sin el teatro yo no hubiera descubierto nada de esto, no sería yo. No sé quién sería si no hubiera descubierto el teatro. 

¿En qué proyectos de actuación fuera del colegio fuiste parte?
Fuera del colegio, empecé a actuar desde que tenía seis años. Estuve en una academia que se llamaba Artestudio Kodaly. Cada año hacíamos una temporada de teatro, entonces ensayábamos una obra y la presentábamos durante ocho fines de semana a público abierto. A lo largo de los años pude ser parte de siete temporadas de teatro con Kodaly, hasta que me gradué de la academia a los doce. De ahí, ya no participé en obras de teatro fuera del colegio, sino que me dediqué más a conocer del cine. Hasta Cuarto Bachillerato volví a meterme a cosas de actuación para el colegio. Me metí a un curso de cine de Casa Comal para aprender más sobre cómo funciona el cine en general. Pero tuve la oportunidad de actuar en dos cortos ahí; mis primeros dos cortos. Luego, en Quinto tuve la oportunidad de irme a Los Ángeles a un curso de cómo hacer audiciones y cómo presentarse para managers y agentes de la industria.

¿Cuál crees que fue el momento en el que te diste cuenta de que la actuación es tu pasión?
Realmente nunca tuve un momento en el que dijera «aquí empecé, y aquí me di cuenta de que a esto me quería dedicar toda mi vida». Desde los seis años me enamoré de actuar y fue algo que fue creciendo a lo largo de los años, nunca me imaginé haciendo nada más. No es que yo tuviera que decidirlo, siempre estuvo ahí, siempre lo supe. Creo, si tuviera que decir un momento en el que ya tuve que tomar decisiones y ver lo que tendría que hacer en el futuro y después del colegio, fue en Tercero Básico, cuando empezamos a conocer un poco más de universidades. Decidí que tenía que buscar universidades para cine, para actuar. Pero, realmente, siempre supe, desde que me metí a teatro de chiquita, que era algo que siempre quería hacer y no quería dejarlo para nada.

Si pudieras volver a presentar una obra, un papel, ¿cuál sería y por qué?
Sería la última obra que hicimos en el colegio; ese año se nos da la oportunidad de escribir nuestras propias obras. La nuestra se llama «Una mesa ausente», era teatro existencial, y el tema era las religiones. Fue un tema bastante interesante de explorar y me dieron la oportunidad de ser la antagonista de la obra. El personaje era algo totalmente opuesto a lo que creo y a lo que soy, entonces me ayudó muchísimo a descubrir varias técnicas de actuación; poder enfocar emociones en cosas que no son reales y volver lo que estoy sintiendo en ese momento, como nervios, al enojo que estaba sintiendo el personaje. Este personaje me ayudó mucho a descubrir mis límites y conocer formas de enfocar cosas que no soy a hacer un personaje realidad, que es totalmente opuesto a mí.

¿Qué crees que es lo que resalta a un actor/actriz de los demás?
 Yo creo que lo que nos resalta es nuestra pasión; somos muy apasionados. Creo, aunque cada actor pueda ser muy diferente en su vida cotidiana y en sus procesos de preparación, puede que no todo el tiempo te des cuenta de que es un actor; no todos son extrovertidos, aunque muchos no lo crean, y cada quien tiene su proceso creativo bien distinto. Si hay algo que he visto en todos es que somos muy apasionados y amamos mucho lo que hacemos. Actuar es algo que no se persigue solo porque «ay, quiero trabajar de la actuación» porque realmente no es un trabajo que se pueda conseguir así nomás. Tenes que pelear por él y aprender mucho; enfocarte mucho en el arte. Es una profesión a la que se le dedica mucho tiempo y esfuerzo, entonces hay que ser muy apasionado y estar dispuesto a perseguir ese sueño. Al final, eso es lo que es, un sueño que muchos tenemos.

¿Cómo podrías motivar a los actuales alumnos del colegio para involucrarse en el teatro?
Hablaré de la actuación en general, más que en el teatro. Aquí, la verdad que el hecho de que es una carrera difícil y complicada de perseguir es, en realidad, un factor muy bueno para nosotros los actores porque no es algo que todo el mundo persigue. Puede que haya personas muy apasionadas por actuar, pero no lo van a perseguir todo el tiempo. Entonces los que estamos dispuestos a actuar y seguir este sueño somos muy pocos; en especial, aquí en Guate que es una industria que todavía está creciendo, pero ese es el punto: está creciendo. Entonces, si estás empezando, si te estás metiendo ahorita a actuar, te estás involucrando y estás dedicado a aprender al respecto vas a ser de los pocos que lo está haciendo. Vas a ser de los pioneros de este arte. Puede que sí, ya lleva bastante tiempo creciendo y empezando, pero todavía cualquier persona que se meta es un pionero. Cualquier idea que se les ocurra a la cabeza, les prometo que va a ser revolucionaria porque todavía están creciendo muchas ideas y están viendo cómo mejorar; cualquier cosa que se te ocurra va a cambiar y afectar mucho la historia de la actuación acá en Guate. El punto es no tener miedo y tirarse al agua; siempre tener en cuenta que no es fácil, en ningún lugar, ni siquiera en países donde la industria es bien grande; actuar es una carrera muy competitiva. Hay oportunidades, es solo de saber buscarlas e informarse mucho al respecto. Yo decidí informarme estudiando cine y ahora eso me ha abierto muchísimas puertas para poder actuar y poder, incluso, crear mis propios proyectos para actuar yo misma. Entonces, sí, hay muchísimo campo para experimentar también. Prueben, hagan, y de verdad cualquier cosa que se les ocurra puede cambiar muchísimo cómo se están haciendo las cosas en la actuación aquí en Guate.

¿Qué nunca olvidarás del Teatro Montessori?
Creo que algo que siempre voy a recordar es ese sentimiento de ver cómo el teatro podía unirnos como compañeros, como grado, como clase. Ver a tantas personas, que tal vez nunca habían actuado o no estaban muy interesadas en actuar, verlas tan esmeradas por contar una historia. Siempre cuando la gente se une por contar historias es un sentimiento que no se olvida y tenerlo con todos ellos, con personas que no lo hacen normalmente, era muy lindo. Saber que el teatro podía a unir a tantas personas de esa forma y ver el esfuerzo que ponían por una obra de teatro es un sentimiento que no se olvida. En pocas palabras, fue la enseñanza de saber cómo contar una historia puede unir a las personas.