Muchos conocemos a Japón como el país del anime, cosas tiernas o kawaii y comidas ricas y coloridas, ¿no?, pero no muchos conocen el lado más oscuro o raro de este, por lo que en este artículo te contaré de una leyenda urbana que hace referencia a un juego antiguo.

Kagome Kagome es el nombre de este juego y de primeras el nombre no se oye nada malo, pero no es lo que parece, pues esta leyenda es más terrorífica de lo que muchos creen. Kagome significa círculo, al igual que jaula y rodear en japonés.

En este juego, un niño es elegido como el «oni» o demonio en japonés. Este se sienta con los ojos tapados en el centro de un círculo formado por otros jugadores. Los demás tienen que unir sus manos y caminar alrededor del oni cantando la canción de Kagome Kagome. Cuando esta canción termina, el oni tiene que decir en alto el nombre de la persona que cree que está detrás suyo y, si acierta, el jugador tendrá que cambiar de lugar con el oni. Se vuelve a repetir lo mismo de antes y el oni no podrá cambiar de lugar con ningún jugador hasta acertar el nombre.

Existen muchas teorías sobre el origen de este juego; sin embargo, la peor teoría es la que cuenta que este se originó en el año 1942, en plena Segunda Guerra Mundial, específicamente en un orfanato de Shimane. Los soldados nazis habían utilizado el orfanato para llevar a cabo experimentos clandestinos que se realizaban en los niños. Estos experimentos se basaron en buscar un interruptor en el cerebro humano que al activarse provocaba que se envejeciera lentamente, hasta terminar en la muerte. Los nazis creían que si lograban encontrar este interruptor y extraerlo o apagarlo no envejecerían y se convertirían seres inmortales.

Muchos niños murieron a causa de estos experimentos inhumanos. Fueron enterrados sin estar en ningún registro, pero después de muchos intentos fallidos los nazis lograron extirpar la parte que creían que era el interruptor del cerebro de una niña, para luego reanimarla. Cuando despertó, todo parecía normal, así que siguieron con este proceso en muchos niños más, los cuales lograban comunicarse con normalidad. Todo iba «bien», pero los niños comenzaron a mostrar comportamientos extraños. Recorrían los pasillos con una sonrisa grande y eufórica. Cuando uno de los niños se quedaba solo con un cuidador, su rostro cambiaba rápidamente a uno de odio. Así estos comenzaron a rodear a los cuidadores mientras cantaban Kagome Kagome, yendo en círculos y mirándolos con caras monstruosas, aterrorizando a los demás.

Al finalizar la guerra, uno de los cuidadores dejó un testimonio donde contaba que los niños le pedían que jugara con ellos este mismo juego, al cual él accedió, pero luego de ver sus caras y ojos salió corriendo atemorizado. La leyenda cuenta que el orfanato sigue en pie hoy en día, se dice que los niños siguen allí adentro, no como fantasmas, sino como seres que fueron condenados a una vida eterna. Se dice que muchos han entrado al orfanato, pero que luego de esto nunca salieron y no se volvió a saber de ellos.

Conociendo la historia de este juego y leyenda, ¿te atreverías a entrar al orfanato? ¿Te parece terrorífica u horripilante la historia de esta? ¿Qué piensas acerca de esta leyenda?

Para mí, esta leyenda es una simple leyenda, la cual es divertida de contar y compartir. Tal vez a muchos no les haya parecido tenebrosa esta leyenda, tal vez a otros sí, pero eso depende del punto de vista y la opinión de otra persona, así que, bueno, esta es mi pregunta final: ¿estás listo para jugar?

La imagen de la portada fue diseñada con IA a través de Canva.

Autora

Sakura Fukuyama

¡Hola! Soy Sakura, estudiante de 3ro. Básico. Me encanta la música y todo lo que tenga que ver con crímenes o terror. También gusta mucho viajar, en especial si es a bosques o reservas. ¡Espero que te gusten mis artículos!
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