¡Hola a quien sea que esté leyendo esto! Mi nombre es Fiorella, soy una alumna de quinto bachillerato y es un gusto para mí poder escribir uno de los primeros artículos en esta columna, y para empezar me gustaría que se pregunten: ¿Alguna vez te has sentido juzgado o tratado injustamente por cómo te ves?

El bullying basado en la apariencia es un problema real que afecta a muchos estudiantes y personas, pero es muy importante recordar que eres mucho más que simplemente cómo te ves. Es natural querer destacar y encajar, pero es crucial entender que cada uno de nosotros es único y nuestra apariencia física es solo una pequeña parte de lo que somos. Tenemos pasiones, talentos, personalidades y sueños que nos definen mucho más allá de lo que muestran nuestras características físicas. Todos merecemos ser tratados con respeto y empatía, sin importar cómo nos veamos.

Cuando yo estaba en los años de 4to, 5to y 6to primaria, solía tener muchos barros. Fue un momento muy difícil de mi vida, mi mamá me llevó con diversos dermatólogos para ver cómo superaremos este problema, era una gran inseguridad para mí. Recuerdo muy claro una vez que uno de mis amigos me dijo «tú serías mucho más bonita sin todos esos puntos en la cara, pareces pizza», y así empezó. Eran pequeños comentarios en broma de varias personas, y nunca supieron lo tanto que me afectaban. Cada broma era como un tiro al corazón, me convertí en una niña de 10-11 años que no podía salir de su casa sin tener cobertor para esconder cada imperfección en su cara. Me enfoqué mucho en mejorar esos aspectos de mí, lloraba con mi mamá que no me sentía bonita a culpa de eso. Pero siempre tuve a mis verdaderos y cercanos amigos, que nunca me mencionaron nada de ello, porque ellos eran conscientes de que no eran mis amigos por mi aspecto; eran mis amigos por la persona que yo era dentro.

Ahora, cuando me pongo a pensar en esos momentos de adversidad en mi vida, logro sonreír, porque al final son parte de la persona que soy hoy en día. Criticar a alguien por su aspecto físico es probablemente algo que muchos de nosotros hemos hecho, incluso no intencionalmente, pero sí subconscientemente. Invito a todos a tratar de ser más empáticos, uno nunca sabe lo tanto que pueden llegar a doler pequeñas bromas o pequeños comentarios y uno siempre tiene que tratar de ponerse en los zapatos de la otra persona.

Dejo aquí algunos tips y sugerencias para crear ambientes más positivos y a su vez lograr superar esta negatividad:

• Empatía: como había mencionado, antes de juzgar a alguien por su apariencia, considera cómo te sentirías en su lugar.

• Enfócate en lo positivo: en lugar de centrarte en lo que no te gusta de ti mismo o de los demás, enfócate en las cualidades positivas. Todos tenemos algo único y hermoso que ofrecer al mundo.

• Autoaceptación: aprende a amarte a ti mismo tal como eres. Con el tiempo, la confianza en uno mismo puede hacer que las opiniones negativas de los demás sean mucho menos relevantes.

Recuerda, eres valioso por lo que eres por dentro. Tu apariencia es solo una parte de ti, pero tu carácter, tus acciones y tus contribuciones son lo que realmente importa.

«La verdadera belleza en una persona se refleja en su alma», Audrey Hepburn

La imagen de la portada fue tomada de Printerest.