Entender las cosas es difícil porque nunca vamos a entender todo. Apenas nos entendemos a nosotros mismos como seres humanos singulares; es difícil entender todo aquello que no somos. Si tratáramos de entender todo, la vida perdería su sentido y magia, dejando vacío un sentimiento de curiosidad. Intentar entender todo nos mata. No entender las cosas nos mata.

Yo no entiendo muchas cosas. Este año me ha ayudado a comprender que, cuando crees tener todo resuelto y bajo control, la vida te enseña, a su manera interesante, que no se puede controlar y entender todo. Yo me he peleado con mucha gente, con la vida y con el universo, intentando entender las razones de las cosas. He sufrido por eso.

Yo no entiendo por qué la gente hizo lo que hizo. No entiendo por qué las cosas pueden cambiar de un momento a otro. No entiendo por qué las cosas no salen a mi manera. No entiendo por qué la vida te da algo verdaderamente bonito y sano y luego decide que se convertirá en una lección de vida. No entiendo por qué las lecciones de vida son cosas que en algún momento fueron un impulso en nuestra vida.

Es muy probable que yo nunca entienda esto. Probable que, cuando tenga a mis hijos, les comparta un sistema de pensamiento que los condene a intentar entender todo. A vivir una vida en la que nunca van a intentar entenderse a sí mismos, sino a todo lo que está a su alrededor.

Nunca voy a entender por qué hice lo que hice. Por qué soy como soy. Cuándo cambiaron las cosas. En qué momento pasó lo que pasó. Tal vez esa es una de las condenas que me toca en mi vida.

Pero wow. Qué suerte tengo de sentirme de esta manera. De sentir las cosas de manera tan profunda. Qué suerte que yo, con solo diecisiete años de edad, he llegado a sentir cosas que alguna gente puede pasar una vida sin sentir. El dolor, que significa que alguna vez hubo felicidad, hubo cariño, hubo cuidado. Todo aquello que siento me recuerda que soy humana. ¿Qué más puedo pedir?

Tal vez no siempre vaya a entender todo. Tal vez no quiero entender todo. Tal vez, en algún punto de mi vida me voy a entender a mí misma y la gente a mi alrededor va a hacer lo posible por entenderme, entendernos, y eso va a ser suficiente.

Hagamos el esfuerzo de luchar por las cosas que queremos, no importa lo raras o difíciles que sean. Todo va a valer la pena y la alegría cuando nos sentemos un día y digamos: «Qué suerte tengo de sentirme de esta manera».

No podemos entender todo porque no somos todo. No seamos todo, seamos nosotros.

La imagen de la portada fue diseñada con IA a través de Canva.