A principio de año siempre empiezo con nuevas metas y motivaciones. Me propongo hacer más ejercicio, comer sano, sacar mejores notas, etc. Algunas veces no lo llevo a cabo. Pasa algo en el camino que me desmotiva, pierdo interés o tal vez solo me conformo. La ley de atracción nos habla de cómo podemos visualizar nuestras metas y volverlas nuestra realidad.
Si vemos nuestro cuerpo en un microscopio podremos ver que las partículas del cuerpo están en constante movimiento. Todo lo que sentimos: enojo, felicidad, tristeza… todo se ve reflejado en el movimiento de las partículas. Y esas partículas son como una radio que están en sintonía solo con la música (las vibras, las acciones y los hechos) que tiene el mismo movimiento. Es decir, si estás feliz y piensas en cosas felices eso es lo que atraes y, si estás frustrado, eso es lo que atraes.
Entonces, ¿qué atraigo? y ¿es de verdad eso lo que quiero atraer? Si la respuesta a la segunda pregunta es «no», tal vez tengas que cambiar tu paradigma. Este se encuadra en la parte del cerebro subconsciente. Esto es lo que ya estamos predispuestos a pensar. Para cambiar el paradigma, tenemos que cambiar cómo pensamos, cómo vemos las cosas y qué agradecemos.
La próxima vez que tengas un paradigma negativo, párate en un espejo y háblate; dite solo cosas buenas. También puedes hacer una lista de cosas de las que estás agradecido. Recuerda que, como dijo Albert Einstein: «El conocimiento es limitado, la imaginación rodea al mundo».
Autora
Kamila Basterrechea
¡Hola! Soy Kami y estoy en cuarto bachillerato. Soy la más pequeña de tres hermanos y la orgullosa tía de dos sobrinitos. Me gusta mucho estar con mis amigos, ver películas, leer, escuchar música y hacer actividades afuera, pero lo que más me gusta son los animales. El caballo es mi animal favorito en el mundo y practico equitación desde hace cinco años.
