«Si quieres cambiar al mundo, empieza por tender tu cama».

William H. McRaven

Empiezo con una frase que cambió mi perspectiva de ver el mundo, de ver la forma en que podemos formar una rutina y así establecer una calidad de vida mucho mejor. Y es que sí, es cierto. Una cosa tan pequeña como hacer nuestras camas puede cambiar nuestro día de maneras increíbles, empezando por generar un estado de satisfacción y orgullo al cumplir nuestras metas, incitándonos a seguir adelante y seguir cumpliéndolas, primero de corto plazo hasta las de largo plazo. Es por esto que considero cierto aquel dicho que dice que «los logros más trascendentes están hechos de pequeños pasos». 

Los hábitos pueden empezar por cosas pequeñas, como desayunar todas las mañanas, lavarnos los dientes y arreglarnos para salir. Con el tiempo, estos hábitos van aumentando y tomándonos mas tiempo. Es así como se forman las rutinas, las cuales establecemos todos los días o semanas, inclusive las llegamos a crear desapercibidamente, ya que nuestra mente se programa para hacerlas de forma automática.

Estas mismas costumbres son cruciales para el crecimiento humano, siendo una determinación para la organización y eficiencia en la vida de las personas. Está comprobado por estudios que llevar hábitos nos ayuda a tener una mejor calidad de vida, previniendo problemas de salud, dando un estado de felicidad y satisfacción hasta mejorando nuestro aspecto físico. No solo esto, sino que aumentan el desarrollo de la autonomía y potencian la organización y el orden mental de las personas.

Para concluir el tema de los hábitos y rutinas, me gustaría impulsar a los lectores a que se planteen metas, para que estas después se conviertan en hábitos diarios y puedan formar rutinas en algún futuro. Yo empecé por cosas pequeñas, como ordenar mi cuarto todas las noches y organizar mis materiales para el día siguiente, y después eso me llevó a establecer una rutina mucho mas constante, la cual me genera placer y felicidad, además me impulsa a seguir adelante y tener hábitos nuevos y saludables en mi vida.

Y tú, ¿ya arreglaste tu cama hoy?