«Centrarse en el aquí y ahora ya no es un lujo sino una necesidad para nuestra salud emocional, física y mental».
Jon Kabat Zinn

Muchos de nosotros vivimos en nuestros pensamientos y no tenemos nuestra atención en lo que está pasando a nuestro alrededor.  Quiero que despejes tu mente un momento y te enfoques solamente en tu respiración, si quieres puedes cerrar los ojos, y presta atención a tu inhalación y exhalación, cuánto aire inhalas y qué tan frío está. Podemos darnos cuenta de que, al realizar este ejercicio, nuestra mente se despeja y si lo realizaste de manera correcta te sentirás más relajado. Estar presentes aquí y ahora es la clave para poder disfrutar cada momento de nuestras vidas al máximo, significa no vivir en el futuro o en el pasado. Algunos conocerán este término como mindfulness, atención plena.

Aplicar este entrenamiento a nuestra vida cotidiana puede beneficiarnos de diversas maneras, tales como aliviar el estrés y por ende síntomas físicos o psicológicos relacionados a él, mejorar el estado de bienestar, apoyar el desarrollo de una mayor compasión y la capacidad de discernimiento, ayudar a la productividad y mucho más.

Tomar conciencia de la realidad no es un cambio que se logra de la noche a la mañana es un entrenamiento diario que toma tiempo y esfuerzo. Para comenzar esté cambio, el primer aspecto es no juzgar, aunque nos resulte difícil; no juzgar las situaciones que vivimos nos ayuda a mantenernos curiosos y saber que todo pasa o no pasa por alguna razón. Lo que me lleva a lo siguiente, que es aceptar lo que viene a nuestra vida y verlo como una oportunidad. La atención es otro paso fundamental, ya sea atención a tu respiración, a lo que escuchas o haces. Lo último es ser paciente y tener autocompasión a nuestro proceso de desarrollo.

Ya que te he compartido acerca de lo que trata mindfulness y lo que necesitas, te compartiré dos ejercicios que puedes implementar a tu rutina diaria y darán un cambio drástico a tu vida.

1. Despiértate 10 minutos antes para poder tener tiempo para ti mismo y no prestar atención a nada, no música, ningún tipo de electrónico ni planes para el futuro o arrepentimiento para el pasado. Solo unos minutos para tener atención vigilante a tu respiración y lo que está pasando en ese momento.
2. El siguiente ejercicio puede sonar algo inusual, pero presta atención a lo que comes. Muchos al comer estamos viendo el teléfono o planeando lo que haremos al terminar y vivimos llenos de distracciones. Desayuno mindfulness consiste en la disposición de la atención a los sabores, olores, la textura y los colores.