Miércoles 23 de junio de 2020

Christina abre sus ojos con la luz cegadora que emerge de su ventana, y su reloj interno y el reloj digital de su teléfono, que se encuentra en su mesa de noche, le indican que son las 7 am, hora de despertarse como es de costumbre, se frota los ojos, mira a su alrededor para ajustar su vista a luz de su cuarto y estira sus brazos con la esperanza de dejar un poco la pereza mañanera de lado. Casi por instinto, después de despertar se levanta de su cama y ve el calendario de la semana. –─«miremos qué clases me tocan hoy y qué materiales debo de tener listos para comenzar el día y ver a qué horas me toca mi primera clase» piensa─.

Después de asegurarse de cuál es su primera clase del día, abre la puerta de su cuarto y baja las gradas hacia la planta de abajo para saludar a su familia y a cualquier persona que encuentre en su camino ese día. Va directo a la cocina a hacer su característico desayuno, que incluye: huevos y a veces, si desea hacerlo más especial, huevos con tortilla, también disfruta de un rico huevo duro o inclusive estrellados, ─«cualquier variación en la cocción de mi desayuno depende del día, pero aun así todos son ricos» piensa─. Después de desayunar, Christina sube a bañarse antes de pasar toda la mañana recibiendo clases y, entre ellas, aprovecha a adelantar un par de tareas.

Llega la hora del almuerzo y es momento de ayudar a su mamá a cocinar el festín que degustará toda su familia esa misma tarde. ─«Debemos buscar una receta que les guste a todos… algo rico, pero fácil de hacer» piensa─. Mientras que considera qué hacer de almorzar para ayudar a su mamá y comenzar a cocinar, su hermana Natalia baja las gradas para apoyar a su hermana grande y a su mamá a cocinar la comida del día.

Luego de disfrutar un delicioso almuerzo, es hora de ayudar a su madre con alguna de las tareas de la casa. Actividades como barrer, mantener la cocina limpia y tener la casa limpia y ordenada son algunos de los quehaceres de la casa que mantienen ocupado su día de una manera productiva y le permiten darle ese apoyo extra a su familia en cada aspecto que se le sea posible.

Luego de ayudar con las tareas del hogar y tomar un par de horas extras del día para adelantar las tareas de la semana es hora de hacer un poco de actividad física. ─«Es de suma importancia encontrar un balance entre las tareas y las actividades personales», opina─. Por eso, para despejar un poco la mente y dejar el estrés atrás, salea caminar con su hermana y su bella perrita para que ella también pueda hacer un poco de ejercicio, respirar un poco de aire fresco y, por cuestiones del destino, hay un parque para perros justo en su condominio, lo cual le permite soltar a su perrita y que pueda explorar sus alrededores y descubrir nuevas áreas del parque que nunca había descubierto antes. Lastimosamente últimamente ha estado lloviendo mucho y por eso debe de modificar sus horarios para disfrutar ese tiempo de descanso, en ocasiones especiales inclusive tiene la dicha de ayudar a su mamá con el vivero que tienen en casa y tener ese tiempo de madre e hija que tanto disfruta tener.

Al dar la noche finalmente y estar más relajada, disfruta viendo la televisión mientras hace una de las cosas que más le apasionan: dibujar, pintar y por medio del arte expresar cada una de esas emociones e ideas en un lienzo y poder visualizarlo físicamente.

Finalmente, llega la hora de dormir y descansar, esas altas horas de la noche en donde lo único que desea hacer es recostarse en su cama con un buen libro, una pijama cómoda y la compañía de la luz de la luna, cerrar los ojos con las palabras de los libros distorsionándose en la oscuridad y finalmente descansar, cerrar los ojos y comenzar el día siguiente otra vez.