Ficha elaborada por: Ana Lucía Gómez, Quinto Bachillerato, 2015, Colegio Internacional Montessori, Guatemala
Nombre completo Julio Serrano Echeverría

Nacimiento

 

Deceso

 

Información biográfica

Ha vivido en Guatemala y estudió un tiempo en Estados Unidos, vivió en el D.F y tambien estudió en El Salvador.

Información académica

Ha sido becario de la fundación Carolina y de FONCA-AECID y tiene una página en internet con el nombre Cuatro Caminos. Dirigió el proyecto de publicación en línea Libros Mínimos.

Libros publicados

Título

Año

Editorial

País

Género

Las Palabras y los días

2006

Cultura

Guatemala

Poesía

Trans 2.0

2009

Libros Mínimos

Guatemala

Poesía

Fractal-antología

2010

Fundación casa poesía

Costa Rica

Poesía

Actos de magia

2011

Espiral

Costa Rica

Poesía

Obra

Las nueve de la noche

Las nueve de la noche es una buena hora para tomar un bus, hay más espacio, igual se va parado pero es distinto. A las nueve de la noche, el calor de un bus, es casi humano.

Se sube uno distinto, quien va ahí recostado en el tubo no es él, es un otro.

No hay mucho por buscar en sus ojos, el párpado marchito y un tanto más oscuro no dice nada, a nadie le dice nada, no hay ánimo de escuchar.

Pesa demasiado un bus a esa hora de la noche, el motor se escucha fuerte, es el silencio de las manos apretándose al tubo el que lo hunde, el que lo hace crujir.

La luz se refleja también cansada, como un caracol pegado en la ventana.

Todos regresarán, todos.
Llega entonces la parada, inevitable.

El otro camina, sabe hacerlo, sabe acelerar el paso sin hacerse evidente, sabe muy bien que no se le puede ver, su mirada debe ser rápida y asesina, que no se vea la esperanza de corazón tibio ni su piel echándose color.

Sabe muy bien el otro que debajo de los puentes, en las esquinas, en las curvas pegajosas de la noche, está la muerte vigilante, un parpadeo extenso, un apretar la bolsa, un algo de más en el cristal del ojo es suficiente.

El miedo es de saber guardarlo, cuidarse de no dejarlo caer, que se parezca al cansancio pero jamás al miedo, que no se vean las pupilas dilatadas. 

Y no es la paranoia de la foto de un cadáver en el suelo ni los sonidos lejanos de una semiautomática parabólica de la noche, no se trata de ponerse trágico, se sabe, se intuye que en el mejor de los casos casi todos llegarán a su casa a escuchar noticias, a prender
la tele.

No se trata pues del temor a la muerte, sino del rito, de la danza oscura de los que suben a un bus a las nueve y se aferran a un tubo con los restos del día, se sabe, sin mucho, que entre todo esto también ha de tener sentido vivir.

 

 

Esto no era un Viaje

Te aseguro que esto no era un viaje, de este lado solo compartíamos las lentas transiciones del cielo y del desastroso conteo de los de a pie, de los que todavía les suenan los pasos. Nos contamos las sombras para sentirnos más, pues en jauría no causa sueño la oscuridad, en manada siempre habrá una patada fraternal golpeando para ver si no estás muerto. Antes de salir tatué mi brazo "vivo te quiero, pisado", en el brazo por si tenía que estrellar los puños para partir la tierra, solo por si me miraraba arriconado contra locura y tenía que ganarle por la fuerza, al principio miraba esas letras y sonreía, después fue solo una mancha en mi piel con para reconocer mi cadáver. Hubiera hecho algo mejor en toda la espalda, huebiera rellenado de palabras esos espacios transparentes de piel que aún me tenía, mejor me hubiera escrito mil veces tu nombre Yakelin, y no solo esa mancha azulada en mi pecho, y no solo ese grito animal en mi brazo.

 

 

Ustedes no Saben nada de mi Silencio

Ustedes no saben nada de mi silencio, nada saben, ni quisieran saber.

Ustedes en la cola del banco encuentran en mí un pretexto para ensayar el gesto que enseñarán a sus hijos repitiendo despacito “cuando un indio se quede mudo frente a vos hacele así, mirá”.

Ustedes no saben nada de mi silencio, tampoco vos y tu delirio poético de ponerme palabras en la boca. Ustedes no saben quién soy yo, ustedes no saben de dónde vengo, lo que ven acá es nada más una pequeña sombra por debajo de una puerta cerrada, sin que nadie tenga claro quién es el que está adentro.

 

 

Hay cuerpos desnudos en las casas


Hay cuerpos desnudos en las casas. Sillas plásticas mojadas por la piel. Hay habitaciones empolvadas sosteniéndole los pies a un hombre solo, a una mujer sola. Hay catres viejos sacudiéndose, sábanas blandas que se resbalan en la arena, labios secos explorando intimidades por el agua. En cierto material inerte de los días se escuchan rechinar por las ventanas los dientes afilados de los cuerpos que deambulan por las casas.

Crítica

Si la magia es la realidad de lo imposible atravesada por trucos e ilusiones, supongo también que las palabras utilizadas para describirla o comentarla deben ser, si no engañosas, sí flexibles y siempre dispuestas a la resignificación. Comentar la magia es una empresa dificultosa, y por eso mismo llena de posibilidades liberadoras. La escritura en grado cero como afirma Roland Barthes, es el acto de magia por excelencia de este texto.

Ante este panorama me encuentro al comentar Actos de Magia por de Julio Serrano Echeverría. En el libro se presentan imágenes efímeras que escapan y se desprenden del gesto de la escritura. Por eso, excusando de antemano, afirmo que hoy escribo con el hígado y los sueños hinchados de impotencia. Pues como afirma Serrano en el poema "A un cuerpo que sueña su propia lucha contra el mal".

Juan Hernández

Es muy interesante su forma de escritura, ya que habla mucho de Guatemala. Utiliza metáforas al escribir para expresar mejor sus ideas; me gusta el uso de guatemaltequismos. Los poemas de Trans 2.0 hablan de amor y pérdidas y tienen un toque sombrío y me puedo dar cuenta de la tristeza que, en mi opinión, emana la mayoría de poemas de este autor.

Fuentes

"Actos de Magia"

Ramírez, P (10 de octubre de 2012). julioSE. Obtenido de julioSE: http://julioserrano.blogspot.com/2012/10/actos-de-magia-por-pablo-ramirez.html